PATTI SMITH and Her Band en Montevideo
Teatro de Verano (20 de Noviembre de 2019)
A pesar de sus anónimas gafas
oscuras, jeans y playera blanca, un rioplatense se nos acercó con un CD del
“Banga” y le pidió un autógrafo y un selfie. Ella siempre es amable con los
fans. Antes de irse, el tipo no regaló su mate.
-A pesar de la diferencia de
edad, ella es mi novia. En la semana que viene viajaré a Uruguay y a Argentina
para verla- Lancé la primicia durante un rico desayuno, de tamales y
bolillos, en Ciudad de México. Mis generosos amigos y anfitriones me vieron tan
emocionado que se alegraron conmigo.
En la madrugada del miércoles
veinte de noviembre, el trayecto de Lima a Montevideo se me hizo eterno. A las
diez y algo de la mañana, ya instalado en un hostel cerca al parque Rodó, me di
un baño con agua y perfume. El lunes, Patti y yo habíamos acordado vernos, lo
antes posible, el mismo día de su concierto.
Al mediodía, nos encontramos en
el hall de mi hospedaje. Nos abrazamos por más de cinco minutos. Cinco minutos
intentando compensar nuestras ausencias de varios meses. Salimos en busca de
algún restaurante, pero hacía tanto calor que nos sentamos bajo la sombra de un
inmenso árbol que da al frente de una pista de patinaje, cerca al Río de la
Plata. Mirando con atención hacia la izquierda, se podía distinguir el Teatro
de Verano.
-Hoy no estaré en la prueba de
sonido. Solo lo hará la banda. Ya coordiné todo con Lenny. Quiero aprovechar
este tiempo para estar contigo.
Henchido de alegría le acaricié
las dos colas plateadas de su larga y vigorosa caballera.
A nuestra derecha, como a tres
metros, nos llamó la atención un octogenario que tarareaba “I'm just waitin' for a
dear friend of mine. I'm waiting for my man” de nuestro ángel Lou. El
anciano batallaba con su artritis mientras se preparaba un porrito; algunos
minutos después, por fin le dio unas fumadas.
Sonriendo, ella me dijo:
-Bendita sea la marihuana. A mi
generación nos dio calma ante tanta locura.
Me puse serio:
-Al menos ustedes supieron hacer
arte con la locura. Lo que no me gusta de la marihuana son los ‘fumones’; y tú
sabes muy bien Patti que los detesto. Además, soy de la generación del
Rivotril. Lo sintético sobre lo natural. Tal vez, peor que un ‘fumón’.
-A veces eres muy gracioso cuando
intentas ser serio-, su sonrisa se convirtió en una prolongada carcajada que me
contagió.
Cerca de la dos de la tarde, nos
pusimos de pie apoyados en nuestras manos, y así enlazados recorrimos el
malecón, conversando sobre su gira y mi reciente viaje a México, sobre sus
hijos y sobre mis papás y mis hermanos. Nos detuvimos en mitad de la playa
Ramírez: gente alegre, relajada, bañándose, jugando fútbol y voleibol,
mateando, conversando y riendo. Luego nos sentamos sobre un pequeño muro.
-Mi muchachita punk. A esta hora
los restaurantes deben estar llenos. Mejor almorcemos algo ligero y peruano.
Saqué de la mochila una Inca
Kola de medio litro y dos paquetes de galleta soda San Jorge. Las comimos
compartiendo un paquete a la vez. Siempre que nos vemos, nunca conversamos
sobre política, activismo y demás tonterías similares. Las pocas horas o días
que podemos estar juntos son en verdad nuestros propios y exclusivos momentos,
una forma de recargarnos mutuamente para nuestras posteriores batallas en el
mundo exterior. Ella combate con la guitarra y la tinta sobre el papel. Yo, con
su música y su poesía.
Los planes y las promesas llenas de poesía
fluyeron mientras presenciábamos el atardecer
mateando yerba con un poco de Inca Kola.
Apenas las luces artificiales
invadieron la playa,
enrumbamos hacia
el Teatro de Verano. Al llegar nos alegramos porque lucía repleto de gente.
-Estaré en la cuarta fila, por
el lado derecho. Suerte mi guerrera. A encender esta pequeña ciudad.
Patti se desató el cabello, y antes
de darme un beso jugó con mi cerquillo: -Disfruta del concierto. Haré un saludo
que solo tú entenderás. Te veo mañana en Buenos Aires. Buenas noches, mi
cholito lindo-.
(HENRY A. FLORES)
(HENRY A. FLORES)
Setlist:
(1)Dancing Barefoot.
(2)Redondo Beach.
(3)Ghost Dance.
(4)My Blakean Year.
(5)Beds Are Burning.
(6)Beneath the Southern Cross.
(7)Free Money.
(8)I’m Free / Walk on the Wild Side.
(9)After the Gold Rush.
(10)Pissing in a River.
(11)Because the Night.
(12)Gloria: In Excelsis Deo.
(13)People Have the Power
(2)Redondo Beach.
(3)Ghost Dance.
(4)My Blakean Year.
(5)Beds Are Burning.
(6)Beneath the Southern Cross.
(7)Free Money.
(8)I’m Free / Walk on the Wild Side.
(9)After the Gold Rush.
(10)Pissing in a River.
(11)Because the Night.
(12)Gloria: In Excelsis Deo.
(13)People Have the Power